Una película que reúne diversos elementos para crear una historia hermosa, dramática y en algunos momentos graciosa. El maestro de las casualidades, las situaciones mágicas y soluciones fantásticas: Roberto Benigni nos deleita una vez más con su pintoresca manera de hacer del cine una poesía de amor en esta cinta, con un guión que conjuga el tipo de diálogos que las personas normales suelen hacer con la elocuencia y la poesía.
La trama se desarrolla en un contexto histórico real, la situación mundial antes y durante la guerra de Irak en el 2003, a pesar de la época en que tiene lugar la historia, no se trata de la típica película bélica que muestra el escenario de una guerra donde al final se aprecia un ganador y salvador de la situación como ocurre normalmente en las películas norte americanas, de hecho en “El Tigre y la Nieve” Irak no juega más que el papel de escenario que, por la situación que atraviesa dicho país, solo complica la vida de los personajes, en especial la de Atillio (Roberto Benigini).
La vida de Atillio resulta ser una especie de burbuja, distraído y soñador por excelencia este hombre se pasa los días viviendo por tres motivos, sus tres grandes amores: sus dos hijas, la poesía, y la mujer con la que sueña cada noche, y lo rechaza cada día. Atillio es poeta, da clases en una universidad de Roma, y recientemente publicó su último libro de poemas (que le da titulo a la cinta), eternamente enamorado de Vittoria (Nicoleta Braschi), la mujer de sus sueños, la sigue a todas partes, la vigila, le promete amor eterno y se lanza a sus pies. Pero cuanto más le presiona, ella más se resiste. Vittoria que también forma parte del mundo literario: en este momento se encuentra escribiendo la biografía del poeta iraquí más importante de la actualidad, que ha vivido durante años en París y que está preparando su regreso a su hogar en Bagdad para poder estar con su gente si estalla la guerra. Un día, Attilio recibe una llamada del poeta iraquí, ahora de regreso en Bagdad, tiene terribles noticias: Vittoria, que viajó a Irak para completar su biografía, ha sufrido heridas graves y se encuentra a las puertas de la muerte, él no lo duda un instante y lucha a toda costa por llegar a Bagdad y salvar la vida de su amada, aunque esto lo haya involucree en situaciones complicadas que el libra con tal de pelear por un amor tan bravo como un tigre y tan puro como la nieve, desde la llegada de Atillio a Bagdad la historia se muestra complicada y conmovedora.
Todas las películas tiene puntos bajos, pero a pesar de ello “El tigre y la nieve” es bastante buena, y muestra el ingenio que Benigini ya había impregnado en “La Vida es Bella” (1997). Sin duda “El tigre y la nieve” es una película italiana ampliamente recomendable que conjuga un sin fin de elementos que le embellecen y le hacen entretenida.
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